Mujeres no deberían de entrenar con pesas...

A menudo, y sobre todo les pasa a las mujeres, se teme que como efecto de un entrenamiento, los músculos crezcan demasiado y de un modo repentino, nada más tocar las pesas. Ellas tienen miedo a desarrollar tanta masa muscular que acaben con una apariencia masculina. Esto deriva en situaciones extremas en las que se observa a mujeres, por ejemplo, entrenando polea tras nuca después de elegir el peso más ligero. Al hacerlo, no se ejercitan correctamente, ya que son tan pocos kilos que ya se equilibra con el peso de la propia barra, de forma que realmente no tienen que hacer ningún esfuerzo para mover el aparato y es una

pérdida de tiempo.